Las cinco estaciones de esquí y de montaña del Pirineo de Girona cierran la temporada de invierno con cerca de 785 104 usuarios. Se recupera así la afluencia de visitantes y se mejoran las cifras de la temporada anterior.
En una temporada marcada por las nevadas abundantes y la buena climatología —en especial, entre enero y marzo—, las óptimas condiciones de las pistas de esquí y los gruesos de nieve, las estaciones de esquí y montaña volvieron a ser un importante motor económico en el Pirineo catalán.
La estación de esquí de Masella recibió 330.765 esquiadores durante los 139 días, y las 18 noches de esquí nocturno, que estuvo abierta. Esta fue también la estación catalana que presentó más días de actividad ininterrumpida durante la temporada de invierno. Las tres estaciones de esquí y montaña de Ferrocarrils de la Generalitat —La Molina, Vall de Núria y Vallter— sumaron 446.539 visitantes y 134 días de actividad, desde el puente de diciembre hasta Semana Santa: La Molina con 279.859 usuarios, Vall de Núria con 102.008 usuarios y Vallter con 64.942 usuarios. Por su parte, Guils Fontanera recibió 7.800 usuarios, 4.500 de los cuales adquirieron forfaits de esquí. Este año, la estación de esquí nórdico abrió sus puertas un total de 114 días y el número de usuarios aumentó un 50 % con respecto a la temporada anterior.
Una vez finalizada la temporada de esquí, las estaciones de montaña de Girona —Vall de Núria, La Molina y Vallter— presentan su oferta de primavera y verano en el marco del proyecto Pirineu 365 con el objetivo de promover las actividades en la naturaleza y la alta montaña para todos los públicos. En Masella continúa la oferta deportiva y de ocio con las actividades que se organizan desde Alp y el Abrigall Hostel.